Un consejo amigable
Un consejo amigable para los estudiantes de diseño:
Hay millones de tutoriales en internet si desean aprender a usar herramientas de software o literalmente cualquier otra cosa , así que la próxima vez que critiques que tus profesores son malos primero piensa esto: ¿estoy dedicándole tiempo a aprender lo que me enseñan o estoy tratando de pasar una asignatura sin dedicarle tiempo a intentar aprender , preguntar y cuestionarme todo por lo que estoy pagando?
Muchas veces he escuchado de alumnos comentarios del tipo: “Prefiero comprar un curso web, porque aprendo en menos tiempo” Parece que cuando algo nos “cuesta más” de forma directa, nos es mas interesante que pagar por lo mismo de forma presencial.
La educación ya es un producto de consumo hace rato y con gratuidad o sin ella, el alumno a adoptado una actitud de cliente ante el producto que recibe. La pregunta es ¿Le saca partido a este producto?¿Aprendió cómo usarlo en detalle?¿O solo reclama insatisfacción sin cumplir con su parte de contrato? Si, el usuario se compromete por contrato a cumplir con las condiciones del servicio (Se llama matricula).
Con esto no pretendo decirle a nadie que si no le interesa estudiar le deje el espacio a otro, o que es mejor comprar cursos en la web a los estudios formales, sino todo lo contrario: Sácale provecho al día, a la clase, a los años en un lugar seguro para fallar y levantarse sin mas consecuencias que reprobar una asignatura que puedes volver a cursar en un semestre más. Un riesgo mínimo en comparación a perder la cuenta de un cliente importante o peor que eso, el trabajo.
Y ya que hablamos del tiempo que se debe dedicar para aprender a “usar” un producto, esas míticas diez mil horas de instrucción para llegar a dominar algo y sacarle provecho ¿Sabe el alumno sacarle provecho a su tiempo de instrucción? Es crucial hacer un buen uso del tiempo que pasas con tus profesores, no es fácil encontrar mentores tan calificados en la vida empresarial y si bien algunos han dedicado gran parte de su vida a la academia y no tienen tanta experiencia profesional como podríamos desear, son sin duda una buena fuente de experiencia teórica de la que deberías sacar provecho para tu proceso de aprendizaje, lo que deja a quienes si comparten una vasta experiencia profesional y educativa como una fuente obligada como guía en tu desarrollo.
Una carrera es un proceso teórico-practico donde conoces lo básico para desempeñarte en un mercado del cual seguirás aprendiendo al poner en práctica lo aprendido para ganar experiencia. El titulo no hace al diseñador, pero si valida ante todos el proceso de al menos cuatro años que has debido pasar para obtener las competencias que seguirás desarrollando a lo largo de tu vida.
Para todos quienes dudan y se sienten atrapados en una carrera que pareciera solo ir cuesta arriba cada semestre, les recuerdo que el diseño y sus metodologías y herramientas son como la vida misma; van y viene, siempre cambian, donde la forma en que lo enfrentes es tu herramienta más importante. Los softwares y las metodologías solo existen para ayudarte con tu proceso de diseño, no son mágicos. Recuerda que en la Bauhaus no existían y que la gente con solo un lápiz y papel logro cambiar el mundo.
Rafael Chávez S.
Director – El Diario Diseño
Diseñador Industrial/Máster en Diseño