El Descubrimiento de la identidad
La identidad de una nación o sociedad es otro de los elementos que es difícil de comprender y expresar fácilmente, ya que los elementos que la componen son variables, mutables y representativos en distintos niveles para todos quienes habitamos un territorio definido por esta idea. Y Si bien hay elementos simbólicos que nos aúnan, tales como la bandera o el escudo; cuando hablamos de identidad estamos hablando de la forma en que expresamos (formal, informal, tangible e intangiblemente) todas esas ideas de lo que consideramos como propio.
Hoy en día ser latino o americano, es una forma de entender y expresar una forma de ser y de sentir la idea de lo que somos como sociedad y los anhelos que tenemos; una forma particular por la cual lograremos cumplir nuestros deseos, en nuestro caso “hacerlo a la chilena”.
Afortunadamente y con gran alegría he podido ver en las nuevas generaciones, que esta idea de chilenidad y de hacer las cosas ha ido cambiando para bien y, que si bien aún queda algún atisbo de negatividad en la expresión de “hacer las coas a la chilena” como una idea de que siempre nos esta faltando algo, es quizás esta una de las ideas más sensatas que tenemos; comprender desde la autocrítica, lo que podemos mejorar más allá de culpar a la mala suerte por algún resultado desfavorable en el ámbito internacional.
Hoy la mentalidad de redefinir la identidad parte con las acciones de refundación de lo que somos y del como nos entendemos; partiendo con una hoja en blanco un nuevo diseño y no un rediseño, una mejora que construye sobre las bases del capital humano existente y que no pretende pasar aplanadoras o quemar los cimientos de la sociedad en su conjunto.
Aprender a diseñarnos es entender que como país cambiamos a la par de los tiempos y que tratar de encasillar una idea de lo que somos en una frase, imagen o colores, es solo una pequeña parte de lo que estamos comenzando a entender de lo que somos en conjunto y la nueva forma que nos queremos dar y demostrar.
Hoy no celebramos que nos descubrieran, hoy celebramos que quienes llegaron, pudieron descubrir un nuevo mundo de pensamiento, cosmovisión, espiritualidad, ciencia, arquitectura, diseño, ingeniería; un nuevo mundo que dio pie a la culturización de una Europa ignorante y sumida en el oscurantismo de los sesgos político-religiosos que los privaron de identidad y que los polarizaron entre sí por siglos de guerras territoriales sin sentido, antes de entender que como cultura podían hacer mucho más juntos que separados.
Hoy las Américas, a pesar de todo lo que nos ha tocado vivir desde aquel 12 de octubre, hemos podido demostrar que somos capaces de estar, más que a la altura de Europa, a la altura de los desafíos que el mundo nos plantea y que podemos solucionarlos, con una mirada puesta en diseñar desde la experiencia y la empatía que nos identifica, la misma que es piedra fundamental de nuestra identidad.
Sigamos adelante; estamos destinados a descubrir nuestra propia identidad.
Rafael Chávez S.
Director / El Diario Diseño