Crónica de un diseño anunciado

October 19, 2022 3:19 am Published by

final

Me pregunto si al diseño le faltan mejores problemas o mejores clientes; la verdad no tengo claro hasta que punto podremos cambiar las cosas solos, ya que sin duda dependemos de una industria ligada a un modelo que busca subsistir por medio de la producción en masa que tiende a rentar, en la simbiosis con las economías de escala, donde producir mas a menor costo, productos de menor valor, pero de alta demanda, pareciera ser la ecuación perfecta para lograr una potencia económica. Si no preguntémosle a China.

Cambiar el modelo de la triada diseño/producción/promoción, pareciera ser algo insalvable para el tiempo que suponemos nos queda para seguir viviendo de forma segura en este planeta. Estamos tan lejos de cambiar los hábitos de consumo y producción , como de lograr desarrollar una tecnología real para poder cambiarnos de planeta y comenzar desde cero en otro.

La variable “conciencia social” se ve amenazada por la casi nula posibilidad de injerencia que tiene sobre el consumo de las personas. Meter miedo sobre el cambio climático, una crisis global, guerras por el agua y el aire, se ven aun irreales para la mayoría de las personas que no se ven afectas a estas carencias. Despertar la conciencia del consumidor para cambiar el modelo que la industria del diseño, su producción y promoción a través de los estereotipos y arquetipos que el marketing y la publicidad han tatuado a fuego en las mentes de quienes entendemos por felicidad el tener mas cosas, es casi ingenuo.

Hasta que no te falte algo, hasta que no sufras el dolor de algo, no eres capaz de tener conciencia real de tu propia vida y de los efectos que tus propias costumbres están aportando al aceleramiento de un fin que se ve real e inevitable.

Hacer responsable al consumidor del problema, es la estrategia que esta usando el mercado para intentar ahorrar en los costos de sus propias acciones, a la vez que sigue tratando de encantarlo con las cualidades del nuevo producto de moda, una paradoja de garrote y zanahoria clásico.

Es difícil decretar la salvación del mundo por el diseño desde la perspectiva de quien lo tiene todo. Solo puedes desear más desde la normalidad del tener las cosas. Es tan simple como que quien no tiene nada, no esta pensando en comer caviar en París, esta pensando en como pasar el día habiendo comido algo.

La irrealidad que los medios de promoción están realizando en las mentes del consumidor, sumado a las ansias de generar mas ingresos en un mundo en crisis, solo nos ayudan a perpetuar un modelo que profundiza la crisis de la cual pareciera que no podemos salir por nuestra propia cuenta.

Quizás es verdad que de cuando en vez el mundo se auto regula y alguna catástrofe mundial (más allá de las pandemias ya conocidas) podrá impulsar un giro en ciento ochenta grados y, enfocar al diseño y el mercado, en retomar el camino del desarrollo de valor a escalas industriales, para el beneficio de una humanidad que solo podrá decretar el permanecer vivos un día más.

Oscuro, pero cierto; ojalá me equivoque.

Rafael Chávez S.
Director – El Diario Diseño
Diseñador Industrial/Máster en Diseño